Firefox es el navegador menos seguro según un estudio encargado por Google
La compañía Accuvant
ha analizado por encargo de Google los principales navegadores para
conocer su estado en materia de seguridad. Chrome aparece como el más
seguro, seguido de Internet Explorer. El que peores resultados obtiene
es el navegador de Mozilla, Firefox.
La lucha por ser el mejor navegador no solo se limita al número de usuarios, sino también al nivel de seguridad. Internet Explorer es el navegador con más clientes, pero Chrome recorta distancias y Firefox se
mantiene como una clara alternativa. Sabiendo que en usuarios por el
momento pierde, Google ha encargado un estudio a Accuvant para conocer
el estado de seguridad de los tres navegadores, y en los resultados
destaca que Firefox ocupa la última posición y Chrome la primera.
El estudio de Accuvant se ha centrado en
analizar las características de seguridad de los navegadores y la
adopción de sistemas o tecnologías para ello. La compañía ha analizado
siete categorías iguales en los tres navegadores, y según sus
resultados, Chrome es el que mejor protección ofrece a sus usuarios.
El navegador de Google ha aprobado 6 de los 7 puntos por disponer de la tecnología estándar de la industria.Internet Explorer de
Microsoft se ha convertido en la segunda opción, ya que ha respondido
con los estándares de la industria en 4 de las 7 categorías y en otras
dos ha mostrado soluciones propias. Por último aparece Firefox, que obtiene los peores resultados y solo supera 3 de las 4 categorías.Los tres navegadores coinciden en no disponer de sistemas efectivos para la gestión y control de listas negras de URL. Este es el único aspecto en el que Chrome obtiene un signo negativo. En el resto de características analizadas el navegador de Google puede presumir de contar con la tecnología estándar de la industria.
Las grandes diferencias entre los
navegadores se producen en las categorías de Sandbox, plug-in de
seguridad y de JIT Hardening (refuerzo de código). En los dos primeros,
solamente Chrome cuenta con los estándares de la industria. Internet Explorer tiene sus propias soluciones implementadas y Firefox directamente
no tiene. En el caso de la categoría JIT Hardening, que hace referencia
a que el navegador cuente con un refuerzo de parte del código, Firefox es el único que no aprueba.
Según el portal Neowin, desde Firefox han
restado importancia al estudio asegurando que cosas como el Sandbox son
un complemento útil para el navegador, pero no son una panacea. En este
sentido, desde Firefox han asegurado que en su caso
trabajan para dar “una respuesta rápida a los problemas de seguridad
cuando salen”, y se han mostrado “orgullosos de su reputación en materia
de seguridad, que es “una de las prioridades centrales de Firefox“.
Con esta declaración, en Mozilla restan
importancia al estudio, que se ha centrado en analizar las tecnologías
de cada navegador y no en ver su respuesta ante las amenazas. Pese a
ello, los datos sí confirman que Chromee Internet Explorer cuentan con sistemas que Firefox por el momento no tiene.
Por qué importa la guerra de los navegadores
18 abr
El navegador es la puerta de entrada al mundo de la web.
Es un producto importante porque es a
través de él que se accede a las páginas de internet y, dependiendo de
lo que cada internauta utilice, la experiencia de navegación puede ser
un gozo o una pesadilla.
No todas las páginas se ven igual o se disfrutan con la misma intensidad en estos programas.
En la actualidad, además, la competencia está más fuerte que nunca. De acuerdo con StatCounter,
el Internet Explorer de Microsoft continúa siendo el líder con un
45,41% del mercado, seguido por Mozilla Firefox con 29,96% y Chrome con
17,11%, según cifras de este mes.
Pero su superioridad ha disminuido
considerablemente. Hace dos años su mercado era superior al 60% contra
el 31% de Firefox y un minúsculo 1,8% del recién lanzado Chrome. En 24
meses, Internet Explorer ha perdido más de 15% del mercado a costa de
sus rivales, en particular de Google Chrome.
Internet Explorer sigue siendo el líder, aunque ha perdido mercado.
¿Pero por qué empresas como Google,
Microsoft y Apple invierten fuertes sumas de dinero en desarrollar
navegadores que son gratuitos?
Aunque a simple vista no lo parezca, los
navegadores son una importante fuente de ingresos para las compañías
que los desarrollan y, sobre todo, para los gigantes de internet.
Para empresas como Apple, Google y Microsoft, estos programas representan una puerta de entrada a todos sus productos.
Windows tiene preinstalado el Interner
Explorer -de ahí su ventaja competitiva en el mercado- y Mac OS X hace
lo propio con Safari.
La principal estrategia de Chrome e
Internet Explorer reside en utilizar como buscador principal el
servicio de la casa: Google en el caso del primero y Bing en el del
segundo.
De esta manera se aseguran que los usuarios llegarán a sus páginas, pasarán tiempo en ellas y generarán ingresos publicitarios.
Firefox sumó más de seis millones de descargas de su nuevo navegador en 24 horas.
Google extiende sus brazos más allá de
Chrome. La empresa es una de las principales fuentes de ingreso de
Mozilla (la organización sin fines de lucro detrás de Firefox) y de
Opera (empresa responsable del buscador del mismo nombre).
Google acordó con ambas el pago de
acuerdos millonarios para ser utilizado como el principal motor de
búsqueda de ambos navegadores.
El buscador también cuenta con una
versión de código abierto de su navegador, llamada Chromium, que ha
permitido el lanzamiento de otros programas alternativos como RockMelt,
que integran Facebook, Twitter y Google a la experiencia de navegación
y dan más visitas al motor de búsqueda.
Mozilla, por su parte, es una
organización que a pesar de no ser de lucro genera más de US$100
millones de ganancias al año gracias a sus acuerdos con terceras
empresas.
“La mayoría de las ganancias de Mozilla
continúan siendo generadas por la funcionalidad de búsqueda incluida en
el producto Mozilla Firefox a través de organizaciones como Google,
Yandex, Amazon, eBay y un puñado de otras empresas”, dijo la
organización en un informe público.
Opera, un navegador con poco margen del
mercado pero al que se le considera como el más innovador de todos,
también dice que sus ingresos provienen de convenios con terceros, de
licencias para ser el buscador oficial en algunos teléfonos celulares y
de su integración con algunos productos de Adobe.
La batalla será móvil
Pero la guerra de los navegadores está
comenzando a abandonar las computadoras de escritorio para centrarse en
los teléfonos celulares.
El navegador de Google ha tenido un fuerte crecimiento desde que se lanzó a fines de 2008.
Cada vez más gente usa los dispositivos móviles para acceder a la web, y las empresas están llevando allá su batalla.
El sistema operativo Android, de Google,
usa un navegador que comparte ciertas características de Chrome, pero
que no es bautizado como tal. Eso, sin embargo, no significa que en el
futuro cercano no lo incluya como el programa predeterminado.
Pero en Android también se puede utilizar Opera y Firefox, con lo que ambas empresas amplían sus terrenos.
En lo que a iOS -el sistema operativo del
iPhone y el iPad- se refiere, Safari es el navegador predeterminado,
lo que explica su modesto pero constante crecimiento. Opera también
cuenta con una versión para los dispositivos de Apple, pero Firefox
sólo tiene una aplicación para sincronizar favoritos e historial.
Internet Explorer Móvil es el programa
predeterminado de los teléfonos Windows Phone 7 y sólo Opera planea una
versión de su navegador para este sistema. Además, este navegador
europeo está presente en teléfonos BlackBerry y Nokia.
El futuro de la navegación parece estar enfocándose en el terreno celular. Según StatCounter,
las visitas a páginas de internet desde teléfonos celulares pasaron de
0,8% del mercado en marzo de 2009 a 4,60% en marzo de 2011.
La puerta de entrada a la red y la llave que representan los navegadores continuarán allí su batalla.